lunes, 22 de febrero de 2010

LA HISTORIA DE LOS HOMBRES



Esta Crónica es sacada de otra.
En una trasnoche radial la escuché contada por el polifacético Alejandro Dolina, quien lo atribuyó a Anatole France.

Ustedes la juzgarán mejor que yo. Dice así, con los pormenores enriquecidos por el excelente relator.

UN REY

En un Reino del Oriente, cuyo nombre ahora no interesa, gobernó un Príncipe que luego fue Rey, que no sólo era famoso por su integridad, sino por sus virtudes y por sus defectos.
En los tiempos bárbaros, pese a los terribles años de guerras, éste Rey gobernaba su Reino como lo hacía con una Gran Familia. Estricto y benevolente tan sólo como los poderosos pueden serlo, estas cualidades pasaban como inadvertidas.
Pero hubo un tiempo de paz en el que, deseando su propia ilustración y la de su pueblo congregó a una multitud de sabios a quienes encomendó la tarea de redactar, nada menos, que "La Historia de Los Hombres".

Quince años pasaron entre batallas, destrucciones, conquistas y sometimientos, hasta que pudo ver desde el balcón de su palacio llegar desde un suburbio vecino una enorme caravana, compuesta de doce camellos cargados con quinientos volúmentes cada uno, de "La Historia de Los Hombres".
Al ver descargar tamaña cantidad de libros, adornados con los mejores cueros y filigranas, el Rey se dió cuenta que le resultaría imposible leer los seis mil volúmenes. Nada peor para cualquier hombre que prefiere la práctica deficiente a la sana teoría.
Reunió a los Sabios y les ordenó condensar el trabajo.

Otros quince años sucedieron en el Universo y al Rey; guerras y batallas -ganadas y perdidas-, hijos -que nacieron y murieron-, esposas -que lo añoraban o gozaban con su ausencia- y su pueblo que era como el mar con las épocas de ventura y pestes, de paz y desolación.
Una tarde le acercaron aquella labor encomendada, condensada en trescientos libros que ocupaban toda una pared. Como ya el cansancio le ganaba, porque ya otra guerra lo llamaba, pidió que resumieran "La Historia del Hombre" en un sólo Capítulo.

Quince años después, uno de los consejeros ingresó a las habitaciones del Rey. Estaba en su lecho de muerte; los desiertos y las batallas habían consumido al soberano en una época en la cual la vejez comenzaba a los cuarenta años. En el oscuro recinto había mapas, joyas y armas que ya nunca le servirían.
Apenas pudo vislumbrar y entender que venían a cumplir con lo que había pedido años atrás, y que jamás podría leer, porque el sabio no tenía nada en sus manos.
Éste se adelantó, se sentó a su lado, se acercó a su oído y le dijo:
.- Aquí tienes lo pedido, te haré entender la Historia...
El Rey suspiró, y escuchó claramente la frase que le susurró, antes de morir:

.- "Los Hombres sufren..."

3 comentarios:

  1. Qué buena historia...
    El sufrimiento humano es común a todas las épocas y signa también la historia personal de cada ser humano...
    Pero, como dijo Martin Luther King "Quizás el sufrimiento y el amor tienen una capacidad de redención que los hombres han olvidado o, al menos, descuidado."

    Saludos

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  2. bueno pues me parece que en una historia no muy larga plasmaste la escencia de la humanidad.
    Se escucha comunmente que las guerras, que el hambre, el dolor, pobreza, sufrimiento ¿si no existiera eso que pasaría?
    Es algo elemental, creo que me podría llevar bien contigo...
    oye quiero pedirte algo, jajaja
    ¿podrías agregarme a tus contactos? mira mi correo es prinzezzin_glam@hotmail.com

    gracias,saludos

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  3. Desde el momento del nacimiento hasta el momento de la muerte...la vida del hombre es sufrimiento. Y el sufrimiento es perenne porque asi nos han educado y al dar nuestros primeros pasos en la vida vemos sufrimiento por todo lado y los culpables para que suframos son los maestros, la religion y la sociedad.

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